jueves, 18 de septiembre de 2014

Aro aro aro: Las Payas o Pallas

En esta época del año mis redes sociales se llenan de cuartetas, unas patrióticas, otras ingeniosas. Estos versos chilenos se llaman payas o pallas según quién lo escriba y es uno de los elementos folclóricos de Chile.

Pero las payas no son exclusivas de Chile. En todo el Cono Sur son populares. En Uruguay y Argentina las llaman payadas, e incluso son populares en el sur de Brasil, especialmente en el estado de Río Grande del Sur, donde habitan los gaúchos.

En todos estos países existen competiciones de payadores (los poetas ingeniosos que son capaces de improvisar payas) manteniendo un diálogo hasta que uno de los contrincantes no sabe cómo responder. En Argentina Gabino Ezeiza fue probablemente el payador más famoso. En Uruguay el más representativo es quizás Bartolomé Hidalgo.

Estas competiciones se denominan en Chile contrapuntos. Y tienen mucha historia. El contrapunto más legendario lo protagonizaron en 1790 Javier de la Rosa y el mulato Taguada. Según la tradición, probablemente exagerada con el paso del tiempo, estuvieron más de tres días compitiendo. Javier de la Rosa era un patrón muy instruido mientras el mulato Taguada era un campesino ingenioso. El “combate” simbolizó la lucha de clases entre los patronos y los campesinos. Javier de la Rosa aprovechó sus conocimientos en diversas materias para hacerle preguntas hasta que Taguada no pudo responder.
Taguada, yo te pregunto, quiero que me contestes vos: Dios hizo los mandamientos, ¿a qué profeta los dio? 
Callaremos la guitarra, y quedaremos amigos. Caballeros, caballeros, ténganlo por entendido, y recojan las apuestas, que el mulato está vencido.
Según dice la leyenda Taguada murió después del contrapunto. Una versión sitúa su muerte en el lecho del río, acompañado de su amada y muerto de tristeza. Otra versión lo da por suicidado usando las cuerdas de su propia guitarra. Este mítico contrapunto dio lugar a la obra de teatro El encuentramiento (1995) de Juan Radrigán, que se puede descargar en la web de Memoria Chilena.

¿Y de dónde vendría el término paya? Vamos a ver qué nos cuenta Zorobabel Rodríguez en su libro Diccionario de chilenismos (1875):

PAYAR, ADOR, ADURA.
 El pobre campesino que recibe de la Providencia, no diremos el fuego sagrado de los vates, pero sí buen oido i facilidad para versificar improvisando, suele, i mas exactamente solia, acompañado de su guitarra o solo, trovador de poncho i a lo mas de chaqueta burda, andar de villorrio en villorio, de bodegon en bodegon, de mingaco en mingaco, i de velorio en velorio, dando muestras de su habilidad, ora asociándose a los pesares o alegrías de los que le brindaban un plato de comida, un trago para remojar el polvo del camino i una silla, ora buscando un competidor con quien medir su injenio en tosca parodia de las justas poéticas que allá en la Edad Media justaban los maestros de la gaya ciencia.
[…]¿Cuál es la etimolojía de estas voces? No nos atrevemos a afirmar ninguna, si bien nos inclinamos a creer que ellas sean una aplicación a estos rústicos trovadores de
la palabra ppaclla que en quichua es el campesino pobre.
[…]¿Tiene la palabra paya un equivalente castellano? La que mas se le aproxima de cuantas están en nuestro conocimiento es trova, pero trova no trae a la imajinacion
la idea de una composición poética i dialogada, que es lo que distingue a las payas de las trovas.

Sin embargo Rodolfo Lenz duda de esta etimología y la relaciona con un término quechua usado en minería, el pallaco, en 1910 dice esto en su Diccionario etimológico
 PALLA I PALLACO 
ETIMOLOJÍA: Rodríguez propone para pallador en forma dudosa una voz quechua “ppaclla - campesino pobre;” esta voz debe corresponder a Middendorf 624.: p’ajilla - p'aj - igual, llano, bien adaptado[…] lo que podrá haber dado el significado "pobre” pero no "campesino”. De ahí se habrá tomado, abreviando, Dicc. Ac. ''pallador - del quichúa(!) paclla, campesino" I que no existe según Middendorf.
[…]La verdadera etimolojía, ya dada por Cañas 43 para pallaco, es quechua, Middendorf 645: pallar - recojer del suelo, alzar, colectar da los árboles frutas, hojas, flores, | de modo que pallar es -'recojer (los pedazos de valor) en el suelo,” i probablemente en metáfora "recojer el lance, el desafío del contendor poético”. Es posible, sin embargo, como pallay (Middendorf 646) tb. significa "cosecha”, que la acepción de canto se haya primitivamente aplicado a un canto de cosecha.  […]

José Toribio Medina sin embargo le encuentra la razón a Rodríguez y también atribuye a paclla el origen del término, pero en su escrito añade que la grafía payar (con "y" en lugar de "ll") podría sugerir etimología de paya, dos.

Me parece muy curioso que ninguno de los estudiosos relacionen el término paya con payo, que existe en castellano desde al menos el siglo XVI para referirse a los villanos, como ya aparece en el Diccionario de Rosales:


Este "payo" según Rosales viene del nombre Pelayo, muy común en Asturias.

Con el tiempo el término empezó a ser usado por los gitanos para referirse, primero a los pastores que viajaban por la península, y luego de forma más genérica a los no gitanos (para un gitano yo soy un payo y ojo a su ingenio, un sudamericano es un ponypayo –por ser payos de menor estatura).

Además hemos de notar que el término está extendido por Argentina, Uruguay y sur de Brasil, y no por Bolivia o Perú, por lo que veo algo rebuscado buscar el origen del término en el quechua.

En fin, yo no soy lingüista pero dejo ahí  mis pobres razonamientos.

Muchas veces las payas se lanzan en medio de la fiesta, se hace parar la música con la expresión “aro aro aro”. Me parece muy curiosa esta expresión y he ido a ver de dónde viene.

De nuevo no hay consenso sobre su origen. Algunos estudiosos creen que viene del mapudungun “aro-aro” que significa con permiso, lo que encajaría muy bien con el hecho de que antiguamente lo decían los músicos para interrumpir las canciones y poder tomar de su vaso. Esta interrupción sería aprovechada por los más ingeniosos para lanzar alguna paya y así hacer más distendida la espera a que los artistas reanudasen la música.

Zorobabel Rodríguez lanza una sugerencia, podría venir del quechua ¡ari! ¡ari!  y significar “así” o “muy bien”. Bertonio y Lenz opinan que viene del aymara “aro”, mandamiento.


De las distintas opciones la que más me gusta es la de origen mapuche. En otros países tienen tradiciones parecidas, pero usan el término “relaciones” o “bombas”.

Si en un 18 de septiembre has logrado llegar al final de este artículo, es que no eres chileno. ¡¡A celebrar!!

2 comentarios:

  1. jajajaja lo acabé y obviamente no soy chilena...
    Al menos entendí bien que es una paya y el aro aro aro!!
    Cuando me quisieron explicar que era una paya (fue en mi trabajo un jardín infantil, teníamos que decir una paya para que nos dieran el aguinaldo) no se me ocurrió otra cosa que decir: "arrebuscando tomates te he visto el culo y si no te lo he visto me lo figuro..." te podrás imaginar las caras de mis compañeras y de mi jefa cuando dije "culo" (palabra tan fea acá Chile) jajajaja pero me gané el aguinaldo!

    ResponderEliminar